Mateo 7,18-21: 18
Un árbol bueno no puede dar frutos malos, como tampoco un árbol malo
puede producir frutos buenos. 19 Todo
árbol que no da buenos frutos se corta y se echa al fuego.
20 Por lo tanto, ustedes los reconocerán por sus
obras. 21 No bastará con decirme:
¡Señor!, ¡Señor!, para entrar en el Reino de los Cielos; más bien entrará el
que hace la voluntad de mi Padre del Cielo.
* * *
Hay un dicho popular que dice: “a quién a buen árbol
se arrima buena sombra le cobija”. Ese dicho debe venir del análisis de Jesús
sobre aquellos que hacen el bien (árbol bueno) y aquellos que hacen el mal (árbol malo). Me imagino que
muchos interpretarán de que sean cortados y echado al fuego con ir al infierno,
puede ser o puede ser que no. Quizás fue una pequeña amenaza para que la gente
entendiera otra forma del Karma de los Budistas, si haces el "bien" estarás bien,
si haces el mal prepárate para recibir "mal".
Y al final Jesús nos dice quienes entran al reino: “entrará
el que hace la voluntad de mi Padre del Cielo”. No sé exactamente quienes son
los que predican que se salvarán aquellos que simplemente crean en Jesús, suena
bonito, pero esta frase de Jesús es más clara. A la final que es lo que siempre
Jesús desea que hagamos: la voluntad del Padre, nada menos ni nada más.
Ahora bien, quizás la mayor dificultad es “darnos
cuenta” qué es lo que desea el Padre que hagamos…
Feliz inicio de semana.
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